Ventosas
La terapia con ventosas consiste en la aplicación de las ventosas sobre la piel, con las que se hace el vacío, succionando la piel y parte del músculo, de tal modo que se abren los poros y favorece la circulación sanguínea y linfática.
El vacío se realiza de diferentes formas. Si se utilizan las ventosas de cristal, se hace calentando con fuego su interior para que se consuma el oxígeno y se cree el vacío y el subsiguiente efecto de succión. Las ventosas de plástico vienen provistas de una bomba de succión o de peras de goma que permiten extraer el aire.
La terapia con ventosas ayuda a: